El Elche ha dejado de depender de sí mismo para lograr el ascenso directo a Primera División. Tras la derrota ante el Huesca y la victoria del Mirandés frente al Córdoba, el equipo de Eder Sarabia cae a la tercera posición, igualado a puntos con el conjunto castellano-leonés pero con el golaveraje en contra. Esta situación obliga al conjunto franjiverde no solo a ganar sus dos últimos partidos, ante el Málaga y el Deportivo, sino también a esperar un tropiezo del equipo dirigido por Alessio Lisci, que se enfrentará al Almería y al Cartagena.
El margen de error se ha reducido al mínimo para un Elche que, hasta esta jornada, era el líder de la clasificación. La presión recae ahora sobre un equipo que deberá ofrecer su mejor versión en las dos jornadas restantes, con la esperanza de que el Mirandés no sume los seis puntos en juego. Mientras tanto, Eder Sarabia ha dejado claro que el equipo mantiene intacta la confianza para lograr dos victorias en los encuentros que restan y alcanzar el ansiado ascenso directo.